martes, 9 de diciembre de 2008

El tipo que no dormia.

Me acuerdo de la historia del tipo aquel que no podia dormir y que un dia se terminó volviendo loco.

¿Se acuerdan ustedes?

Era un hombre normal, o al menos en apariencia normal. Buen estudiante empezó a trabajar de administrativo en uno de esos cubiculos que son como cadenas de montaje de hombres. Un trabajo impersonal para una persona del monton, pero tampoco le importaba porque al fin y al cabo pensaba que para tener un trabajo con algo mas de perspectiva hacia falta una actitud que el no tenia. Aspirar a mas... y es que él se conformaba con poco.

Era un amante de la rutina como pocos ha habido en la historia. Un animal de costumbres. De lunes a viernes se despertaba a la misma hora, ya no le hacía falta poner el despertador porque su reloj biologico estaba programado para despertarse, pero aun asi seguia haciendolo. Le daba seguridad. Despues desayunaba y se tragaba el atasco de todos los dias hasta el trabajo escuchando la radio. Despues en el curro de ocho de la mañana a ocho de la tarde con parada a comer incluida. De vuelta a casa, cena, tal vez pelicula (si se pegaba un homenaje) y a dormir.

No vivia en su ciudad por lo que no tenía amigos con lo que sus fines de semana se basaban en dormir, ver alguna que otra pelicula y hacer maquetas de barcos de guerra clasicos.

Y el lunes vuelta a empezar.

Entiendanme... no es que fuese un capullo, porque caia bien a todo el mundo. Ayudaba a su portera, su vecina de encima (una viejecilla encantadora) lo adoraba e incluso su vecina de enfrente (una veinteañera que estaba bastante buena) le tiraba los trastos con la esperanza de conseguir algo. Pero el nunca queria nada. Vivia bien en su burbuja atemporal en la que todas las semanas eran un copia y pega de la anterior.

Hasta que un dia, sin ningun motivo, dejó de poder dormir.

En principió penso que era una mala noche. Se metió en la cama, y se quedó mirando a la oscuridad del techo. Como un buho o un lemur o cualquier otro animal que tenga los ojos grandes. "Demasiado café" pensó. Asi que al dia siguiente en lugar de sus cuatro cafés diarios decidió tomar solo dos. Sentía que el cuerpo le pesaba doscientos kilos cuando se metió en la cama... y sin embargo de nuevo como si fuese un buho.

No entendía lo que le pasaba pero no le dió importancia. Y al dia siguiente de nuevo lo mismo, y al siguiente lo mismo.

Y cuando llevaba semana y media sin dormir decidió ir al medico de cabecera. Y entre bostezos le dijo "Doctor, ¿Que tengo?" y tras varios analisis el doctor no supo determinar que le pasaba. "No hay nada concreto..." dijo "...que justifique el insomnio. Usted es un varon sano que come bien, asi a bote pronto no parece que tenga ningun tipo de enfermedad con lo que... lo siento pero no se que decirle. Dele tiempo. Tal vez sea el estres. ¿Ha estado estresado ultimamente? Trate de relajarse y tomese una pastilla para dormir cada noche".

Y el hombre se volvió a su casa preguntandose porqué podria estar un tipo como él estresado y con el bote de pastillas que le habia dado el medico.

Había avisado en la oficina que al dia siguiente no iria (si iba a recuperarse tenía demasiadas horas de sueño que recuperar) y se tomó una pastilla.

Y nada.

A la hora y media de haberse tomado la primera se tomo otra.

Y nada.

A la hora y media de la segunda se tomó dos mas.

Y asi hasta que tuvieron que llevarle al hospital antes de que se muriese por intoxicacion con las pastillas para dormir. Por suerte no se habia dormido (a pesar de todas las que había tomado) y pudo llamar el mismo a urgencias.

Pero alli tampoco pudo dormir. Permaneció despierto mientras le hacian el lavado de estomago e incluso cuando pidio por favor que le diesen anestesia y los medicos accedieron permaneció despierto.

Volvió a su casa y las semanas transcurrieron y el seguia sin poder dormir.

Y a los dos meses de aquello su vida comenzó a adquirir tonos surrealistas. Todo empezó un dia en el trabajo. Habia perdido muchos kilos y tenia unas ojeras tan negras que parecia que le hubiesen pegado o que se hubiese disfrazado. Estaba transfiriendo datos a su ordenador de manera automatica, como todos los dias, sin prestarles ninguna atencion. Y de pronto en su mente comenzó a sonar musica "Digital Love" de Daft Punk. Y entonces de detras de la pantalla del ordenador salió un hombrecillo verde en taparrabos que comenzó a bailar.

Evidentemente se asustó. Cogió el vaso del café y lo cubrió como quien coge un bicho. Sentía al hombrecillo bailar y escuchaba la musica en sus oidos. Levantó y el hombrecillo seguia ahi.

Se levantó. La musica seguia sonando en sus oidos y por raro que parezca la oficina estaba llena de seres extraños bailando al ritmo de Daft Punk. Y nadie parecía verlos mas que él.

Se sentó de nuevo y se quedó mirando al hombrecillo verde.

En realidad era bastante gracioso.

Y su vida continuó de esa manera. A ritmo de musica electronica y viendo seres que bailaban. Lo despidieron de su trabajo pues pasaba largas horas hablando de cosas que nadie mas veia y observando a la nada riendose solo, pero no le importó. Simplemente cambió sus costumbres. Se volvió un ermitaño. Dejó de cuidarse, se encerró en casa, se dejó crecer barba, le cortaron la luz y le amenazaron con echarlo del piso.

Pero a él no le importaba ya nada. Solo bailaba a ritmo de una musica que nadie mas oia con personas que nadie mas veia.

Al final creo que la policia, alertada por los vecinos (que llevaban sin verlo siglos y aquel piso comenzaba a oler a muerto) se lo llevó al hospital psiquiatrico en donde no duró mucho porque ya tenía un desorden alimenticio tan grande que a los pocos meses murió.

Concretamente el dia que consiguió dormirse por fin.